Por si no los has leido aún, te dejamos los enlaces. El primer artículo es Nacimiento de las peluquerías y el segundo La peluquería de los años 20 a los 60
De los 60 a los 80 ~ el peinado como seña de identidad.
Durante los años 60 y 70 hay una revolución en la moda del cabello y el peinado se convierte en una seña de identidad, como siempre, los más jóvenes son los abanderados y surgen las “tribus urbanas”, el peinado se identifica con ideales y convicciones, como seguidores de unas tendencias concretas.
Los “Rockabilies” surgidos en la década anterior, se peinarán con un tupé al más puro estilo Elvis y lo perpetuarán hasta los años 90.
El movimiento “Beat“, los chicos imitaban a “The Beatles” con melenitas y flequillos.
En los 70
Llegó el “Mullet” una auténtica revolución de forma y color: el glam, con David Bowie en cabeza, (flequillo muy corto y pelo más largo en la nuca) que llegó a evolucionar hasta la locura con el movimiento “Punk” con altas crestas de colores estridentes sobre una base de mullet.
Los “Rastas”, que siguiendo los dreadlocks de Bob Marley triunfaron inicialmente entre el público afro-americano, aunque en los 90 se popularizaron a todo tipo de público joven, incluyendo a las chicas.
El movimiento hippie y grunge, propulsaron una moda “anti-peluquería”, priorizaban un pelo descuidado, largo y caído de la manera más natural posible. Pero los imitadores de esta tendencia recurrían al salón para conseguir un aspecto descuidado pero un cabello bien tratado.
peinado-bobHay 2 peinados que se popularizaron de forma desorbitada que fueron: “La permanente” rizos exagerados a lo “Jackson Five” y el “Bob” el peinado de “corte de paje” que presentó inicialmente Vidal Sassoon. Ambos supusieron dos fuentes de ingresos muy importantes para los salones y buscaban: la comodidad, no sólo al llevarlo, sino al peinarlo. La mujer trabajadora del siglo XX necesitaba levantarse, ducharse y estar arreglada en el mínimo tiempo posible.
De los 80 a 2000 ~ la cultura del culto al cuerpo.
En los años 80 se gozaba de una recién estrenada democracia y la obsesión por la estética se compagina con la victoria femenina sobre las grandes batallas sociales, políticas y personales.
cabello-desfilado-de-los-90La mujer ha conseguido emanciparse, y esto supone el empujón final a la cultura del culto al cuerpo. Quiere demostrar que su profesionalidad no está reñida con belleza.
El hombre empieza también a preocuparse más por su físico, a utilizar productos cosméticos, a seguir las tendencias de la moda y a no avergonzarse de dedicarse a los cuidados personales.
Las peluquerías empiezan a crear tendencias, la figura del estilista aparece, proponiendo determinadas pautas de moda, formando corrientes a seguir y permitiendo que el cliente elija lo que mejor le conviene. Aparecen las propuestas de temporada. Color, textura, medida, tipo de corte… quedan a gusto del consumidor.
En los ‘80 se llevaban los cabellos ondulados ligeramente, y en los ‘90 triunfaron los desfilados, los escalados y finalmente las extensiones, pero cada uno con su toque personal.
Nuevo milenio y actualidad.
El camino actual queda marcado por la mezcla de: culturas, estilos, cambio constante, atrevimiento en formas y colores y al alcance de todos, invadiendo las calles.
Imitar sigue siendo un recurso, tanto en hombres como en mujeres, deportistas, cantantes, actores, top-models… Lo más curioso es que los estilistas de estas “celebrity” recogen las ideas y tendencias de la calle y ellos las popularizan y extienden por todo el mundo.
Las modas y tendencias no duran más de una temporada, es fugaz… gracias a Internet y los medios de comunicación actuales.
Tintes, extensiones fijas o de quita y pon, baños de color, postizos, ceras, geles y espumas que texturizan y dan formas, accesorios y complementos, protectores solares… han dejado de ser un lujo para convertirse en una necesidad. En la mayoría de hogares reservan una parte del presupuesto para cuidar su cabello, cambiarlo, colorearlo, darle forma…
Esperamos que el siguiente paso sea la toma de conciencia, añadir al concepto de belleza el complemento de salud y se produzca un incremento del uso de productos ecológicos para el cuidado y el tratamiento del cabello.
Fuente: Hammam&Henna